La fase de crecimiento vegetativo de las plantas de cannabis es la etapa de su ciclo de vida en la cual concentran su energía en la producción de hojas, ramas y tallos, como también en la expansión de su sistema radicular. En esta fase es donde las plantas alcanzan entre el 60 y 90 % de su tamaño final; por lo tanto, la duración de esta fase es un factor determinante para definir el tamaño de la cosecha que se obtendrá al finalizar el cultivo.
Periodo vegetativo de la marihuana
Al inicio de esta fase las plántulas son muy frágiles, por lo que debes tener especial cuidado con su manipulación. Un correcto desarrollo durante esta etapa, ocasionará plantas sanas, fuertes y preparadas para entrar en fase de floración. La floración es la etapa en la cual las plantas frenarán su crecimiento, tanto horizontal como vertical, y concentrarán su energía en producir cogollos, para al final de su ciclo de vida producir una cosecha abundante.
Los principales factores que se deben tener en cuenta durante esta etapa son:
- Calidad y volumen del sustrato o medio de cultivo
- Calidad del agua
- Fertilización
- Régimen lumínico
- Temperatura
«Para conseguir un correcto desarrollo durante esta fase, es fundamental mantener todos los factores básicos constantemente bajo control».
Una vez finalizada la germinación de las semillas, rápidamente estas se convierten en pequeñas plántulas con aspecto alargado que emergen del sustrato donde han sido plantadas. A partir de ese momento se da inicio a la fase de crecimiento vegetativo.
Iluminación
Para que tus plantas se desarrollen correctamente durante esta fase, debes proporcionarles mínimo 18 horas de iluminación cada día. En países tropicales como Colombia, puedes implementar fácilmente y a bajo costo una fase vegetativa mixta, aprovechando la luz del sol de seis de la mañana a seis de la tarde, y complementando con iluminación artificial desde las seis de la tarde hasta las doce de medianoche.
Recuerde que cuanto más tiempo de crecimiento se le permita a la planta, mayor será la cosecha final. En teoría el periodo vegetativo se puede prolongar de manera indefinida, si logras sostener las 18 horas de iluminación diaria, a menos que estes cultivando una variedad autofloreciente.
En caso de no proporcionar las 18 horas de iluminación al día a la planta, esta comenzará a florecer automáticamente entre la sexta y octava semana desde la germinación de las semillas, punto en el cual alcanza su madurez sexual. Para obtener cosechas aceptables se recomienda dar a la planta mínimo 8 semanas de crecimiento vegetativo, con lo cual puede obtener una cosecha de entre 150 y 300 gramos de cogollos secos por planta.
En caso de que implementes un cultivo 100 % interior, debes tener cuidado en no prolongar demasiado la fase de crecimiento vegetativo, ya que el espacio es limitado y aún falta el crecimiento de la planta durante el periodo de floración, aunque en las variedades indica e híbridos con tendencia indica el crecimiento en la fase de floración es muy limitado. En el caso de las variedades sativa e híbridos con tendencia sativa debes prestar mayor atención, ya que generalmente crecen un 30 % más durante la fase de floración.
Sustrato
El tipo de sustrato usado como medio de crecimiento para las raíces de la planta, puede determinar el éxito o fracaso del cultivo. El sustrato solo permite un buen crecimiento radicular si permite el intercambio de oxígeno y posee una estructura ligera. Esto se debe a que las raíces se desarrollan con mayor facilidad y rapidez en sustratos suaves y fáciles de penetrar. Un sistema radicular grande y sano se traduce en una planta con crecimiento fuerte, sano y acelerado. Un sustrato duro y compacto, como lo sería si usa 100 % tierra, frena el desarrollo de las plantas, ya que para las raíces es muy difícil penetrarlo y, además, carece de intercambio de oxígeno.
El sustrato ideal lo puedes conseguir a partir de una mezcla de fibra de coco, tierra negra, materia orgánica (humus) y cascarilla de arroz. También existen microorganismos como las micorrizas, que aportan múltiples beneficios. Otra opción viable, rápida y económica para adquirir un buen sustrato es comprar mezclas listas para cultivo, que se pueden conseguir fácilmente en el grow shop.
Los principales beneficios que trae usar un sustrato adecuado son un rápido crecimiento y producción de hojas tanto en lo alto como en lo ancho. A medida que pasan los días, el crecimiento de la planta se va acelerando, debido a que su sistema radicular se va expandiendo y colonizando el sustrato, lo cual le permite asimilar cada vez más nutrientes que se transforman en nuevas hojas y nuevos tallos.
Fertilización
La nutrición es otro fator clave durante el crecimiento vegetativo, en esta etapa las plantas necesitan principalmente nitrógeno, potasio y microelementos para suplir sus necesidades alimentarias. En caso de no proporcionar los nutrientes necesarios a la planta, se producirá un déficit nutricional que frena su desarrollo, visto en síntomas como el color amarillo en las hojas.
Una opción sencilla y económica para suplir las necesidades alimentarias de las plantas de cannabis son los fertilizantes líquidos orgánicos. Estos permiten un control exacto en la dosificación entre cada aplicación; por lo tanto, se disminuye considerablemente el riesgo de caer en sobrefertilización o en carencias nutricionales.
Agua
También debes prestan especial atención a las necesidades hídricas de la planta, dependiendo del clima y método de cultivo es necesario regarlas con agua aproximadamente cada 2 a 5 días.
Una prueba útil para identificar cuándo debes regar la planta es verificar la capa superficial del sustrato, si este se encuentra seco a más de 1 centímetro de profundidad, es hora de regar las plantas.
La cantidad ideal de agua en cada riego es del 25 % de la capacidad de la maceta que use; por ejemplo, si usa una maceta de 20 litros, lo ideal sería usar 5 litros de agua en cada riego.
Temperatura
La temperatura es un factor muy importante durante el cultivo, ya que de esta depende la actividad biológica de la planta. El rango óptimo de temperatura se puede dividir en dos periodos, temperatura en el día y temperatura en la noche.
Durante el día, periodo donde la planta se encuentra en su mayor actividad fotosintética, el rango óptimo de temperatura es entre 20 y 27 °C. Durante la noche, etapa en la cual la planta se encuentra en estado de reposo, el rango óptimo de temperatura se encuentra entre 10 y 15 °C. Fuera de estos rangos se pueden ocasionar problemas en el desarrollo de la planta.
Antes de tomar la decisión de cambiar el régimen lumínico de las plantas para pasar a la fase de floración, debes asegurarse de que estas se encuentran en un estado óptimo de salud. Haz un análisis para verificar que las plantas se encuentren libres de plagas de insectos, hongos patógenos y problemas nutricionales.
La capacidad de las plantas para recuperarse ante estos problemas es mucho mayor durante la fase vegetativa, ya que puedes mantenerlas en esta fase de manera indefinida. La planta creará nuevas hojas y ramas sanas, permitiendo eliminar las partes afectadas. Durante la fase de floración no es posible hacer esto, porque la planta concentra su energía principalmente en el desarrollo de cogollos y resina rica en cannabinoides.
En síntesis, para obtener un correcto desarrollo de las plantas durante la fase de crecimiento vegetativo, debes prestar máxima atención a la cantidad de horas diarias de iluminación, la composición del sustrato, los nutrientes, la cantidad y calidad del agua y la temperatura del entorno.