Un buen comienzo es la mitad del trabajo. Una vez tienes semillas de buena calidad en tus manos, el primer paso para dar rienda suelta al cultivo es su proceso de germinación.
Las semillas de marihuana solo necesitan agua, calor y oxígeno para germinar. No es necesario el uso de aditivos para germinar semillas frescas y de buena procedencia. Normalmente las semillas germinan en un periodo de 2 a 7 días después de iniciar el proceso.